La esquiadora Matilde Lorenzi murió a los 19 años después de sufrir una caída fatal en un entrenamiento, cuando golpeó su cabeza contra la pista. La joven atleta formaba parte del equipo deportivo del Ejército italiano y su especialidad eran las pruebas de velocidad.
Lorenzi era considerada “la promesa del esquí italiano” por lo que su muerte fue un golpe muy duro para el país y el deporte mundial.
La joven se había destacado el año pasado ganando el campeonato italiano de esquí absoluto y en la modalidad supergigante en la alpina Sarentino. El Ministerio de Defensa confirmó la muerte esta mañana y transmitió su dolor en un sentido posteo en las redes sociales.
Lorenzi, que había nacido en Turín, habría cumplido 20 años el próximo 15 de noviembre, pero murió tras sufrir una grave caída mientras entrenaba en una de las pistas de la estación de Val Senales, en Alto Adige.
El ministro de Exteriores, Antonio Tajani, también lamentó su muerte: “Me entristece la muerte de Matilde Lorenzi, una prometedora esquiadora italiana. Un talento cristalino roto por el destino. Siento el dolor de su familia, sus amigos y compañeros del grupo deportivo del Ejército. Descanse en paz joven campeona”.
En cuanto al lugar del accidente, la policía y la justicia investigaron el lugar y concluyeron que las condiciones de seguridad de la pista estaban en orden.