Hace tres años que Fernando Gray decidió iniciar una batalla que le generó un alto costo político. Enfrentó a Máximo Kirchner y lo acusó de forzar un proceso electoral en el PJ Bonaerense. Presentó una demanda que hoy está en la Corte Suprema y fue aislado del esquema mayoritario de Unión por la Patria (UP). Firme en Esteban Echeverría, municipio que gobierna desde el 2007, decidió enfrentarse a La Cámpora y cuestionar su esquema de decisión en la cúpula del peronismo.
En diálogo con Infobae, aseguró que la agrupación que conduce el hijo de la ex presidenta cerró el espacio político y que se presentan como lo nuevo, pero “hace 20 años que ocupan los principales cargos”. El rol que debe tener Cristina Kirchner en el tiempo que viene, la falta de empatía con la sociedad, la ansiada renovación partidaria y las deficiencias que ve en la actuación de la oposición.
-Máximo Kirchner convocó a las elecciones en el PJ Bonaerense. ¿Fue un gesto de apertura del kirchnerismo en el comienzo de este nuevo tiempo en la oposción?
-Para nada. Un país, una provincia, una sociedad, tienen normas y reglas. Nuestro partido también tiene normas y hay que cumplirlas. Uno no puede estar cambiando las normas todo el tiempo. Es un problema de nuestro país. No se puede adelantar un año la elección, después asumir, luego adelantar un año y medio. Eso genera incertidumbre. El presidente del Partido Justicialista tiene que tomar una decisión. Yo escucho, dialogo y trato de consensuar. Cuando él anuncia que va a adelantar un año y medio a las elecciones, mínimo tiene que haber hecho diez consultas. Tiene que hablar con todos los sectores y llegar a una determinacion. Máximo no es el dueño del partido, ahora es el titular y si quiere tomar decisiones, las debe consultar. Eso fue totalmente inconsulto.
-¿Entonces qué cree que buscó al hacer la convocatoria a las elecciones con tanto tiempo de anticipación?
-No se entiende. ¿Para qué? Había autoridades constituidas cuando él llegó. Vino La Cámpora y adelantó las elecciones un año. Nadie dijo para qué. Se propiaron del partido y proponen adelantar 7 meses la elección. ¿Para qué? Una oposición seria debe tener normas claras, con objetivos claros y consenso.
-En La Cámpora argumentan que es mejor hacerlo en un año que no es electoral, así se genera un orden del partido, en un momento donde el peronismo tiene múltiples discusiones internas.
-Quieren descubrir la pólvora tres mil años después. Esta discusión se viene dando hace 70 años en nuestro partido. Las fechas en los partidos políticos están prestablecidas. Se dan después de las elecciones ejecutivas para saber, depende del resultado, cuál va a ser el perfil del partido. No es lo mismo gobernar la nación y la provincia, gobernar uno de los dos o no gobernar ninguno. Esta discusión ya se dio. Lo que no pueden es cambiar todo el tiempo las normas.
-¿Por qué cree que está públicamente tan solo en este reclamo contra La Cámpora?
-Hay un proceso de cambio en la sociedad. Hace tres años dije que se venía un fin de ciclo, que venía un recambio, que la sociedad se iba a llevar puesta a la mayoría de los dirigentes, y que se venía un recambio en nuestro partido también. Yo anhelo que haya una profunda renovación en el partido. De caras, propuestas, formas e ideas. Esa transformación se empieza a dar. Arranqué tres años atras pidiendo una renovación en mi partido, ahora con el paso del tiempo va a tener más volumen.
-¿Entiende que el proceso de renovación ya está en marcha?
-Si, absolutamente
-¿En qué lo puede palpar?
-En la gente. Todo el tiempo. En la gente sencilla, de la calle. El comerciante, el que trabaja en una pyme o en una farmacia. La gente común que espera. Hay mucha gente que tiene muchas expectativas en este gobierno, pero hay gente que piensa de otra manera y que merece tener una oposicion que esté acorde a esa estructura de pensamiento. Esta oposición no está a la altura de lo que queríamos estar. Necesitamos tener una oposición seria, responsable, con equipos, con propuestas, donde no nos dediquemos solo a rechazar la Ley Bases, sino también a presentar un proyecto de ley alternativo. Que se presente un proyecto de país distinto.
-Máximo Kirchner apuntó a usted sin nombrarlo. Lo cuestionó por el posteo de “otra vez sopa” en sus redes sociales y pidió que ponga la cara. Además dijo que hay intendentes que llegaron a sus municipios de la mano de Néstor y Cristina Kirchner y ahora los desconocen.
-No pude ver lo que dijo porque estuve todo el día trabajando. Con vecinos por el tema de unos créditos, con otros por un tema del servicio electrico y otros con temas de inseguridad. Los streaming duran como tres horas, asi que algún día a la noche lo voy a ver. He trabajado toda mi vida. Estudié toda mi vida porque para gobernar con responsabilidad tenes que estudiar. Estudio especificaciones técnicas para que mi municipio compre con responsabilidad. Me capacito y respeto mucho a la gente que trabaja, estudia y se esfuerza. Para respetar las opiniones me tienen que demostrar que hacen lo mismo.
-¿Está insinuando que Máximo Kirchner no trabaja ni estudia?
-No digo Máximo, porque en términos personales le tengo afecto, pero en términos políticos tengo grandes diferencias. Han ocupado cargos importantes. La organización se ha esmerado en ocupar cargos que tenían el mayor presupuesto. Casualmente estaban en los cargos que había presupuesto. Estaba la dirección de geodesia bancante y no tenían ningún candidadt para poner. Yo revindico a Néstor Kirchner. Respeto a Crstina Kirchner que fue dos veces presidenta y una vez vicepresidenta. Pero también que se respete mi trabajo en Esteban Echeverría. Porque yo también acerco una linda cantidad de votos a este proyecto. Y recuerdo que en el 2009, 2013, 2015, 2017, 2021 y en el 2023 perdimos, pero en Esteban Echeverría no perdimos. Como otros tantos municipios. Aportamos muchos votos a nuestro proyecto y es fruto del trabajo con humildad. Y humildad es una palabra que se las recomiendo.
-En el Congreso del PJ habló de una dirigencia mezquina que definía todo en una mesa muy chica. ¿A qué se refirió puntualmente?
-Es una dirigencia cerrada. Lo manifiestan cientos de militantes en el territorio. No tenemos el más mínimo signo de apertura. Pasan los años y está la misma gente, los mismos actos, los mismos formatos diciendo lo mismo. Es lo mismo. Y hay que abrirse. Después de cada elección yo hago el esfuerzo para ver cómo nos vamos abriendo a sectores nuevos. Cómo vamos esuchando a los nuevos emergentes y colectivos. Porque la sociedad va cambiando. Pero acá no. Acá hay un señor que tiene la lapicera, que se la lleva al Instituto Patria y que allí arma las listas. Las arman ellos, para ellos y con ellos.
-Se refiere a La Cámpora
-Esto no es un club de amigos, es un partido político. El PJ tiene representantes legislativos de una única expresión que es La Cámpora. Pero La Cámpora no puede representar a todo el PJ. Yo tampoco. Nadie representa la totalidad. Uno tiene que tener la grandeza de reconocer que hay distintos sectores y darles espacio de representación. Eso no sucede y como eso no sucede, tenemos y vamos a seguir teniendo, una disputa. Porque tenemos diferencias de enfoques y de cómo se ve la vida.
-En la semana sacó un comunicado dirigido a La Cámpora diciendo: “No entendieron nada”. ¿Qué es lo que no entendieron?
-Nosotros perdimos la elección. Cuando perdes tenes que sentarte y preguntarte en qué nos equivocamos, qué tenemos que reformular, charlar entre nosotros, escuchar al resto, hacer una autocrítica con la sociedad. Acá hay un electorado que nos votó y nos dejó de votar o que votó a otro. ¿No tenemos nada para decirle a ese electorado? ¿Hicimos todo fantástico? Eso que tendría que suceder en un partido, no sucede. No entendieron lo que nos dijo y nos está diciendo la sociedad. Hay dirigentes que están desfasados de la sociedad. Lo primero que tenes que hacer cuando te equivocas, es tener disculpas sinceras con el electorado.
-¿Cree que no sucedió?
-El tema acá es que la culpa siempre es del otro. En el gobierno anterior había dos sectores en puja. Uno que era el sector de Alberto Fernández y otro que era La Cámpora. Los dos estuvieron todo el tiempo en disputa. Esa disputa nos llevó a una derrota electoral. Pero ninguno de los dos sectores se hace responsable de lo que pasó en el país. El responsable siempre es el otro. Pero todos tienen responsabilidad. Es una discusión que no termina nunca. Yo no estuve en el gobierno nacional pero también asumo la responsabilidad. Acá hay responsabilidad de todos pero diferenciadas. Tienen que disculparse con la sociedad. No salieron las cosas bien, no las hicimos bien. Honestamente. Si es honesto y creen que se equivocaron. Es muy probable que crean que no se equivocaron. Ahí está el problema.
-¿No considera que hubo una autocrítica en estos meses?
-No para nada. No escuché a nadie con una autocrítica sincera. En el congreso nacional del PJ se tendrían que haber parado los responsables y decir “miren nos equivocamos, sentémosnos y armemos un equipo”. Cuando uno hace una autocrítica es para reflexionar y no cometer otra vez los mismos errores. Y como mejoras como proyecto y sociedad.
-¿Comparte, como dijo Andrés Larroque, que hay sectores del peronismo que quieren desgastar al gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof?
-Cristina tiene dos hijos. Uno biológico y uno adoptivo. Máximo y Axel. Los chicos se están peleando. En algún momento Cristina los llamará a la cocina de su casa y los alineará a los dos. Esperemos que lo haga pronto, así se ordena la provincia.
-¿Puede haber una rebelión interna contra el liderazgo de Cristina Kirchner?
-No. Yo creo que con Cristina tiene que haber respeto de todos los sectores. Y el respeto no es una palabra menor. Lo que se está discutiendo es de Cristina para abajo. Lo que estamos discutiendo es quién expresa las ideas de nuestro partido y quién lo conduce. Y quién va a expresar la oposición. Hoy pasan cosas y la oposición no tiene la dimensión que debería tener. Debería estar muy presente con las cosas que pasan en el país. Porque las decisiones que se van a tomar acá son para las próximas décadas, como las privatizaciones. Lo que se está discutiendo tiene una gravedad política muy importante.
-¿Qué significa el mensaje en sus redes cuando dijo “otra vez sopa”, con la imagen de Cristina Kirchner detrás?
-Algo muy sencillo pero muy profundo. Estaba hablando con Juan Zabaleta por teléfono. Me llama y me dice “otra vez sopa”. Y yo le respondí lo mismo. Otra vez sopa. Pero no por Cristina, sino porque parece que no entendimos lo que pasó y lo que está pasando. Nos volvemos a juntar los mismos y decimos lo mismo. Dos horas de transmisión. Tenemos que reformular lo que veníamos haciendo y eso es lo que estoy pidiendo. Y esa reformulación viene con una renovación. Obviamente que los que no quieren ser renovados, van a saltar.
-¿Piensa que el ciclo de Cristina Kirchner está cumplido?
-Cristina tiene que estar en otro lugar. Una dirigente que fue elegida dos veces presidenta de la Nación. La gente la votó. Y fue elegida vicepresidenta. Una persona que fue elegida 12 años tiene que ser respetada. Como todo el mundo. Creo que tiene que estar en otro lugar, por encima de todo las cuestiones cotidianas, en otro rol.
-Hay dirigentes del peronismo que dicen que la gente no los quiere escuchar. Que hay un fuerte hartazgo con la fuerza política.
-Todos dicen en off. Hay que hablar en on y asumir responsabilidades. Hechos y consecuencias. Hablar en off significa no tener responsabilidad. En la provincia hay 4.900.000 de personas que votaron otra cosa, expesando otra cosa. Recibí a los 150 despedidos de la empresara tercerizada de Aerolíneas Argentinas. Esa gente quiere que los represente. Presenté un amparo porque están desmembrando el Servicio Meteorológico, que es un lugar técnico, no político. Nuestra oposición tiene que estar presente. Hay un único recurso de amparo que es mío. ¿Qué dijo la oposición? Nada.
-¿Está fallando la actuación de la oposición respecto a Milei?
-Absolutamente. No está cumpliendo bien el rol opositor. Oposición no es pararte en la vereda de enfrente y tirar piedras, es oposición con seriedad y con responsabilidad. Con equipos técnicos sólidos, presentar propuestas y hacer observaciones, y hacer aportes a lo que hace el Gobierno, que fue elegido para gobernar. Tenes que estar presentando propuestas y aportes. Y estar atento a todo lo que está pasando en la sociedad. Aysa es un tema importante. Si lo privatizas cambias todo el sistema de obras en el conurbano.
-Cristina Kirchner aseguró que no hay un respaldo a Milei como marcan algunas encuestas. Sin embargo, se percibe que la sociedad está soportando el ajuste y la política económica. ¿Por qué la gente decidió asumir este costo?
-Estoy en contacto con la gente que es conurbano sur. Hay un sector importante que no está de acuerdo con este gobierno. Pero hay un sector que apoya a este gobierno implícitamente. ¿Cómo? Dicen que hay que darle apoyo. ¿Cuánto tiempo? Un año. Es un cheque en blanco. Hacé lo que tengas que hacer y vemos. Vino un fin de ciclo, la sociedad tienen nuevas expectativas, y este gobierno con explicaciones sencillas, muchas veces de difícil implementación, trató de generar esas expectativas. Eso se va a ver en los próximos meses.
-¿Qué se va a ver?
-La factura del alumbrado público pasó de 70 a 270 millones de dólares. La escencia del peronismo es el trabajo. El motivo ordenador de una sociedad y una familia es el trabajo. El peronismo se fue disvirtuando y se fue convirtiendo en planes sociales. Eso que era temporario en el 2001 se fue consolidando en el tiempo y nos hizo perder en el horizonte. Hay que volver a la escencia de la fuerza política. Para el peronismo hay una sola clase de hombres y mujeres: los que trabajan. No te podes enfrentar con el que genera trabajo. Tenes que defender al que trabaja, pero también tenes que entender que en esta nueva sociedad todos los países del mundo protegen y cuidan a la industria. Por eso no podes abrir indiscriminadamente las importaciones. Ya pasó muchas veces. Están fundiendo a la industria textil.
-¿Entonces cree que, tarde o temprano, este plan económico va a fallar?
-Acá no hay plan económico. Hay medidas aisladas. Hay improvisación. Dejan de pagar todo, baja el consumo, baja la actividad económica y baja la inflación. Dejan de pagarle a todo el mundo y bajan la inflación. Hay menos emisión y entonces baja la inflación ¿Cuá es el plan para desarrollarse? Hoy dejamos de ser competitivos. Tenemos que tener políticas públicas que se mantengan en el tiempo. Este gobierno tiene grandes dificultades de equipos técnicos y propuestas.
-¿Cuál es el objetivo del grupo político que armaron con Juan Zabaleta, Facundo Moyano y Federico Martelli?
-Somos dirigentes de una generación intermedia, que vemos las cosas de otra manera. Que creemos que hay que estar muy cerca de los sectores del trabajo y que tiene que haber diálogo, y una profunda renovación. Pero no se da. No pude ser. Acá viene La Cámpora como lo nuevo. Pero fueron lo nuevo hace 20 años. Hace 20 años que ocupan los principales cargos.
-¿Pero el ciclo cumplido entonces es del kirchnerismo o del camporismo?
-Es una discusión profunda. No soy quién para decir quién se va y quién se queda. Hay que dar una discusión porque hay que abrir el partido a nuevas ideas, espacios y emergentes. El PJ se fue cerrando. Uno ve Córdoba, que la gobierna el peronismo, pero no está en el peronismo que fue gobierno nacional. Hace 20 años que no está. Es una provincia bien administrada, con independencia de criterio, que se diferencia de los gobiernos nacionales. No nos miremos el ombligo en el conurbano y la provincia de Buenos Aires. Hay otro país. Hay un país inmenso. Te digo Córdoba como te podría decir Misiones, donde también gobierna el peronismo aunque no está dentro de la estructura nacional. Gobiernan bien y tienen las cuentas ordenadas.
-Hay muchos dirigentes del peronismo que miran al gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, como una figura nueva que podría encabezar un proceso de renovación.
-Martín es una figura muy interesante que hay que seguirla con atención, como también a la gestión de Córdoba. Pongo a Córdoba como ejemplo de un peronismo que se fue. Cuando el peronismo se fue camporizando, fue exluyendo sectores importantes. Y nosotros no podemos excluir. Porque un partido tiene que abrirse, no cerrarse. Hoy estamos en los pisos electorales históricos. La decisión del peronismo va a ser si nos quedamos hablando entre nosotros, aplaudiéndonos entre nosotros, o hacemos una sincera reflexión y nos abrimos a la sociedad. Y tratamos de conquistar y de abrazarnos con esos sectores que estuvieron con nosotros y se fueron. Lo de Córdoba es un ejemplo de alejamiento. Un militante me decía que hay que ir a buscar a la gente. ¿Sabes dónde está la mejor gente?, me dijo. En la casa, me respondió.
-¿Le parece que es contraproducente el proceso que vive Kicillof, en el que muchos lo ponen en el lugar de presidenciable del peronismo?
-Es apresurado. La provincia de Buenos Aires tiene muchos temas por resolver, empezando por la seguridad. Hace 30 años que estamos discutiendo el tema de la seguridad. Hay que abordarla. El Gobernador tiene que sentar a todos los sectores importantes de la sociedad. Hay que sentar al poder legislativo, al ministerio público fiscal, al poder judicial, a las universidades importantes. Discutir, por ejemplo, desde que edad va a ser punible una persona que cometa un delito. No le cargo esto a Kicillof porque pasaron tres gobiernos de distintos sectores, sin embargo estamos discutiendo lo mismo. La provincia necesita reformas serias y profundas, hoy no corresponde plantear quién debe ser el candidato a presidente.