Un turista canadiense falleció el miércoles al caer de un tren que lo llevaba a la isla de Kho Tao, ubicada en Tailandia. El hombre, identificado como Ryan Joseph Ralph, viajaba con su pareja de origen norirlandés.
Según informó el medio The Sun, un par de horas después de iniciado el viaje, Ryan, de 24 años, había dejado a su novia, Shona Morgan, durmiendo mientras él iba a fumar un cigarrillo al final del vagón, muchos de los cuales no tienen puertas.
El cuerpo fue encontrado el 21 de marzo en las vías de la estación de trenes de Chet Samian por un trabajador. De inmediato, se dio aviso a las autoridades, quienes comenzaron la búsqueda tras el aviso de la pareja del hombre.
Aunque aún no hay un panorama claro de lo ocurrido, se presume que Ryan se golpeó con la plataforma al caer y después fue arrastrado por el tren en movimiento. La investigación inicial concluyó que no había rastros de agresión y que el hombre llevaba muerto al menos cinco horas cuando lo encontraron. Según la policía, no murió en el impacto. Dijeron que “se metió debajo de la plataforma” y murió por pérdida de sangre.
El cuerpo fue llevado al Instituto Forense para un examen post mortem. La policía dijo que había dado los detalles a la embajada de Canadá para informar a sus familiares de su muerte.