Un equipo de investigadores en Estados Unidos y el Reino Unido apelaron a los superpoderes de la Inteligencia Artificial para estudiar detalles de Madonna della Rosa, una pintura de Rafael en la que, según reveló el estudio, habría trazos de otro artista. En concreto, los especialistas encontraron las pinceladas del “intruso” en el rostro de San José, el hombre que aparece en el sector izquierdo del cuadro.
Según explicó el matemático y científico informático de la Universidad de Bradford, Hassan Ugail, la clave para este hallazgo ha sido el entrenamiento del sistema con obras del artista italiano. “Utilizando un análisis profundo de características, utilizamos imágenes de pinturas autenticadas de Rafael para que pueda reconocer su estilo con un grado muy detallado, desde las pinceladas, la paleta de colores, el sombreado y cada aspecto de la obra”.
Madonna della Rosa bajo la lupa de la Inteligencia Artificial
Los sistemas de IA pueden ser entrenados para revisar detalles en las pinturas que escapan al ojo humano. En este caso, el objeto de estudio ha sido la pintura que el renacentista Rafael Sanzio pintó a comienzos del siglo XVI, en español conocida como Virgen de la Rosa o La Sagrada Familia con San Juanito.
Luego del examen, la red neuronal identificó elementos inusuales en el rostro de San José, en concreto, trazos que no coinciden con los de Rafael. Siguiendo a la publicación Science Alert, el debate en torno a la participación de otros artistas en Madonna della Rosa no es nuevo: se remonta a mediados del siglo XIX. El empleo de IA procura echar luz sobre esta discusión, en un estudio cuyos resultados fueron divulgados hace algunos meses en la publicación Heritage Science.
El método empleado para estudiar la pintura había demostrado un nivel de precisión del 98% en la identificación de obras de Rafael. En esta investigación, no solo examinó cuadros completos, sino detalles específicos, concluyendo que la virgen, el niño y San Juan fueron pintados por el maestro italiano; aunque en el rostro de San José intervino otro artista.
“Analizamos las partes individuales (de la obra) y, aunque se confirmó que la pintura es de Rafael, en el rostro de José resultó muy probablemente de otro pintor”, comentó Ugail al respecto. Se cree que los trazos habrían sido realizados por Giulio Romano, uno de los alumnos del renacentista, autor de otras pinturas célebres como Madonna Sixtina.
Amén de los avances que la IA ha inyectado en el análisis de obras de arte, el equipo de científicos que estudió la pintura de Rafael señaló que esas tecnologías no reemplazarán a los expertos de carne y hueso. “No se trata de que la IA ocupe el puesto de trabajo de las personas. El proceso de autentificación de una obra de arte implica examinar muchos aspectos, desde su procedencia, los pigmentos, el estado de la obra, etcétera”, observó el matemático de la mencionada universidad británica. “Sin embargo, este tipo de software se puede utilizar como una herramienta para ayudar en el proceso”, concluyó.